12 de noviembre de 2009

Manifiesto para mi cumpleaños..

La sociedad es tan suceptible y yo tan bruta... que obviamente, no podemos llevarnos bien. Me pregunto, cuando avanzará la mentalidad de todos ellos y aceptarán los nuevos tiempos que corren, sin asustarse, sin llevarse las manos a la cabeza, sin querer ser Santa Teresa de Calcuta. Vivimos en una chapuza de mundo y ninguno somos arquitectos modélicos capaces de cambiarlo, al menos no hasta que mejoremos nuestros errores propios. Pero es muy natural que pesen más los defectos o formas de ser de otras personas, antes que hacer un alto en el camino para analizarnos nosotros mismos. El ego es la tendencia más perfecta que he conocido nunca. Estoy de acuerdo con los principios de cada uno y las mentalidades abiertas o cerradas que tenéis, pero tanta moralidad está acabando con la capacidad de ponerse en el lugar del otro y verdaderamente no, no se puede ir de juez moral por la vida porque os consume y vosotros, ante todo, sois vuestro primer acusado a espera de ser visto para sentencia. Observar es muy gracioso, pero es mucho más actuar, sobre todo cuando sale la vena samaritana de la gente. Y qué gentes. Aún así yo seguiré siendo un mal ejemplo, aunque no encaje en vuestra idealización. Nunca dije que quisiera cambiar... ¿Sabes lo que me pasa? No tengo valor. Tengo miedo, miedo a enfrentarte conmigo misma y decir "está bien, la vida es una realidad. Las personas se pertenecen las unas a las otras porque es la única forma de conseguir la verdadera felicidad." Yo me considero un espíritu libre, un ser salvaje y me asusta la idea de que alguien pueda meterme en una jaula, pero yo misma la he construído y me seguirá vaya donde vaya..Voy a decir mil cosas sin sentido. Así tal cual, espeluznante. No quiero recorrer la inconsciencia del dolor para llegar al punto más desesperante. Que me busquen entre la gente. Me esconderé entre la almohada, sí con almohada. No me verás si no me dejo ver, porque no miras. Ni escuchas. Ni lo piensas. Está clarísimo. Para ti claro, para mí no. Voy a traicionar a mis principios y no voy a hacer lo que quiero, porque sería suicidarnos a los dos juntos con rumbo a un infierno escalofriante. Con vistas a un mar muerto. A veces parece algo que no es, por lógica. Alegraros de que la niña ha decidido sacrificar sus sentimientos por hacer lo políticamente correcto. Lo mejor para todos. Es ese tipo de cosas que cuando seas mayor comprenderás. Pero muy pocas personas llegan a crecer porque suelen morir en el intento. Fanática o despistada. Dejándolo caer por un tobogán un día de viento. Sólo estoy apretando teclas, sin querer decir nada o queriéndolo decir todo. Pero de verdad, es simple sublimación. Si al fin y al cabo, todos pensáis lo mismo. Soy una conversación interesante. Las luces de carteles en la carretera dejan ver las señales de 'escapa, huye' ahora que quizás no es muy tarde. ¿Qué es el tiempo? Es la típica batalla en la que todos perdemos. El tiempo pasa más rápido si eres impaciente, ¿lo has pensado alguna vez? Soy yo la que echa de menos algo de ti que tú no sabes y todos los movimientos rutinarios de tu vida son el veneno de la mía. El silencio, como quien jura guardar un secreto. Si alguna vez abro la boca, prométeme que serás mi verdugo y me harás pagar el delito cometido de quien cuenta algo sagrado. Información como esta no puede caer en manos de...¿cómo decirlo? no puede caer en manos de algo que no existe. El pentágono cayendo sobre el vacío. Todos suponemos que no hay pentágono. Si las cosas comenzaran in media res tendríamos una ligera visión sobre cómo será nuestra vida. No sé, el destino podría dejar de tocar los huevos, por ejemplo. Pero yo le necesito, sin embargo. Necesito que una extraña fuerza inhumana me empuje. Levántate y camina. Me voy a llamar a mí misma y no coger el teléfono. El ring ring es agobiante. Completamente. Ahora, lo suyo, sería reeler esta sarta de palabras y organizarlas un poco. ¡Ah! Pues no pienso hacerlo, si ya total...he decidido en no dar ningún paso al frente. La soldado se retira de la batalla, mi señor. ¡Firme! Sólo quiero una playa, el olor a salitre, la ventana de mi instituto, la lluvia destapando alcantarillas, Paington, los ojos verdes de ciencia ficción, un abrazo, luchar de nuevo, ponerte grave, un mayo de 2009, llorar entre pasillos blancos, bañarme en una piscina en una noche de luna llena, recibir una poesía en la puerta del metro, agarrarte fuerte en el musical de Queen, pintar mi agenda, sentir que nada importa cuando estoy a tu lado, sentir que he nacido para esto, soportar horas y horas el olor de los óleos, que fumes escondido entre el coche y la pared, las tardes de primavera, los días de invierno, las reuniones mágicas donde la edad es sólo un número, escucharte hablar de la tí, chocarme contigo en una discoteca bajo una luz azul, correr por la plazuela para que nadie me alcance, adorar a quien luego odio, llevarlas en mi muñeca las cicatrices, consentirme desde Londres, quedarnos solos en el cine, poner la música muy alta en el coche después de bañarnos en el río, mandarte prepar mi cena por perder el juego de aquella noche, el pantano, los conos, las mañanas de sábado, el muro, el reloj de sol, los portales frescos en verano, asfixiarme hinchando globos para el salón, retardar lo más posible el estudio de la genética mendeliana, asistir sin parpadear al lenguaje no verbal de psicología, rodearme en el pasillo y sonreír, ponerme nerviosa durante el camino a su casa, perder y que cojas mi mando, que se repitan las historias y se multipliquen por dos, los conciertos del impacto, unas patatas fritas, la plaza del acuario donde esperabas sentada, volver a verte compañero de los gatos, el gato, la complicadad de mirar en el momento preciso, ser importante, las cartas del chico de los jueves bajo la mesa de segundo de la Eso, la cancion de Jueves, los castillos de arena, el palacio de Anastasio, el cojín de Winii de Pooh, la combi, horas y horas de viaje, escapar con el coche como las personas normales que andaban por Madrid haciéndome una perra fiel, Madrid, el Starbucks, el abrigo lila, los relaciones públicas, Alicia en el País de las Maravillas, el pueblo fantasma, La Eva de Alberto Durero como síntesis de la perfección del cuerpo humano, las estrellas fugaces, la inmadurez eterna, un documental sobre Rusia y las palabras adecuadas para decir te quiiero, extremoduro, fito & fitipaldis, el roce de tu cuerpo platero, sentirme libre, irme de fiesta, despertar de un sueño, perder, recuperar, amar, sentir..
Que digo lo dejo y luego nunca lo dejo..